New York, New York (1977) de Martin Scorsese fue, es y será una fiesta para mí; porque siempre tuve debilidad y mucho afecto por Liza Minnelli y Robert DeNiro, y tenerlos en la misma película es una gloria. Aunque New York, New York es una película imperfecta, fallida, caótica, que adolece de una larguísima secuencia inicial y una confusión conceptual, tiene algunas de las escenas mejor actuadas de la historia del cine: el pedido de mano y el posterior casamiento, las peleas en los autos, la separación en el hospital y el diálogo final. DeNiro redondea uno de sus mejores personajes. Su caracterización habita la perfección. Minnelli demuestra que puede encarnar personalidades de honda interioridad y jugar el segundo violín con todas las de la ley. La canción del título dio vuelta al mundo y hasta hay versiones en chino mandarín, pero los demás números musicales son igual de buenos. Entre tanta maravilla puede pasar desapercibida una de las mejores canciones de "superviviente": "Pero el mundo da vueltas". Con justicia, uno de los números capitales del cine musical. Transcribo abajo traducción de la letra.
A veces estás contento, a veces, triste
y el mundo gira.
A veces perdés hasta el último mango
y el mundo gira.
A veces tus sueños se hacen añicos,
y no se altera nada.
Créanme, siempre habrá
un verano, un invierno,
un otoño y una primavera.
A veces un amigo comienza a tratarte mal
y el mundo gira.
Y a veces tu corazón se rompe con un ruido ensordecedor.
Alguien pierde, alguien gana.
Y un buen día te dan puntapié tras puntapié.
Pero el planeta da vueltas y el mundo gira,
y el mundo gira,
y el mundo gira,
gira, gira y gira
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