Si hay algo que me molesta más que no me tomen en serio, es que me tomen demasiado en serio.
Normalmente, cuando te encuentras con una persona que parece insignificante y que no llama la atención se dice: detrás de esa fachada, hay más de lo que parece. En mi caso sucede lo contrario: detrás de mi apariencia hay menos de lo que parece.
Si quieres decirle a la gente la verdad, sé divertido o te matarán.
Confiá en tu propio instinto. Los errores bien pueden ser tuyos en lugar de los de alguien más.
Tenés que tener un sueño, así a la mañana podés levantarte.
No es verdad que todos mis colaboradores forzosamente acaben dándose a la bebida. Algunos también se suicidan. ¡Yo no tengo infartos, los provoco!
Ninguna buena acción queda sin castigo.
Dicen que no encajo en este mundo. Francamente, considero esos comentarios un halago. ¿Quién diablos quiere encajar en estos tiempos?
Me gustaría morir a los 104 años, completamente sano, asesinado por un marido que me acabara de pillar, in fraganti, con su joven esposa.
Recuerda que eres tan bueno como lo mejor que hayas hecho en tu vida.
Billy Wilder (1906-2002); escritor; guionista; director y productor de cine estadounidense; de origen austriaco
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