martes, 29 de marzo de 2011

Un consejo para las damas


Nada hay más molesto que la dorada y ocre luz de otoño. Cae sobre el cutis impiadosa, revelando hasta los años que no tenemos. Aprovechen las anchísimas veredas de La Plata y pónganse a cubierto con este cómodo sombrero. Demás está decir que se complementa con un par de oscurísimos anteojos. Espero verlas imponiendo esta moda. No me defrauden.

1 comentario:

  1. no sé, me preocupa dónde guardarlo, mi placard desborda (de porquerías varias, maquéglamourrrrrrr)

    ResponderEliminar