domingo, 18 de septiembre de 2011

A continuación

Un momento inolvidable de la televisión que denuncia una invalorable oportunidad perdida. ¡Qué maravillosa hubiera sido una película musical con Julie y Gene! Por la química entre ellos, por lo bien que sus voces combinan y por la magia que generan. Pero no hay nada que hacer, ¡no hay nada más idiota que un productor de Hollywood!

 (Dedicado a mi hermana, Alejandra, porque aquella mañana de febrero que nos enteramos que Gene había muerto, se nos piantaron gruesos lagrimones, cualquier hubiera dicho que se nos había muerto alguien muy cercano. Y por absurdo que parezca, así había sido.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario